La corriente de hombres y mujeres progresistas de todo el mundo, siempre apoya y ve con simpatía la huelga de los trabajadores por sus reivindicaciones o la huelga general para el derrocamiento de gobiernos tiránicos e insensibles. La huelga es un recurso justo en tanto no sea desviada de su razón histórica.Pero, cuando la huelga sale del control de la clase obrera y laboral y es manipulada y usada por sectores políticos, tan desprestigiados y desmoralizados como el que más de los indolentes patronos, entonces esa huelga pierde su perspectiva y toda su legitimidad.
Hablamos de la huelga laboral por reivindicaciones de los trabajadores. Pero, la huelga general, deja de ser reivindicativa y pasa a la categoría de huelga política, que se usa para el derrocamiento del gobierno tiránico e indolente, que no es el caso que atañe a los dominicanos, pues contamos con un gobierno republicano y, por demás, cargado de sensibilidad y atento a las necesidades del pueblo que le eligió mediante Elecciones Generales libérrimas y legitimadas por las partes enfrentadas.
Es decir, en Santo Domingo no existe un gobierno tiránico; y lo que acaba de acontecer en el sur del país, donde el presidente de la República, Su Excelencia Dr. Leonel Fernández Reyna, acaba de inaugur la Ciudad Universitaria de Barahona, con la que ya suman 7 del mismo tipo en todo el país, y que demuestra que estamos dirigidos por personas sensibles y con visión nacional. Esto para citar tan solo el caso de lo que acontece a nivel de la Educación Superior.
Lo que pasa es que caminamos hacia un nuevo certamen electoral, en donde la nación es llamada a la sucesión de los gobernantes, y, ese camino hacia el 20 de Mayo del 2012, tiene que ser llenado de piedras, espinas, escombros y todo tipo de obstáculos; el gobierno tienen que ser desacreditado por radio, prensa y televisión para sacar ventajas y ganar con la huelga general el favor que no le da el pueblo cada 4 años, al contrario, el PRD ha sido repudiado masivamente en las urnas por los dominicanos y en primera vuelta electoral, por malos, por que solo saben hacer desorden y general crisis en la economía y en la imagen del país en el campo internacional.
Las huelgas son justas, pero solo cuando son legítimas. Y no son legitimas cuando se pretenden usar para fines politiqueros y baratos, "aunque se hunda la nación entera". Somos consciente de que la situación del país es difícil, así como estamos consciente también de que todo es secuela de una situación internacional peligrosa, matizada por revueltas y guerras civiles, que generan aumento excesivo de los combustibles, lo que impacta -como efecto dominó- en toda la economía mundial.
El gobierno debe apretar a los ricos que acumulan riquezas y fortunas sin control, "aunque entre el mar". Debe decretarse un aumento general de salarios, no menor al 30%, y debe continuar con entrega y fe llevando la barca nacional hasta puerto seguro: Pero jamás ceder ante el chantaje y la irracionalidad del PRD.
Ante la crisis mundial, los dominicanos merecemos la unidad nacional y que se permita a las autoridades campear el vendaval.
